Luz Rello: “La tecnología solo es humana cuando se construye con quienes la van a usar” - Ahora
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Luz Rello creció con dislexia. Hoy, esa experiencia personal la ha llevado a impulsar una de las iniciativas más innovadoras en educación, reconocida con el Premio Princesa de Girona Social. Doctora en Informática y licenciada en Lingüística, es un referente internacional en este ámbito y ha dedicado su carrera a demostrar que la tecnología puede ser una aliada de la inclusión cuando se diseña desde la experiencia y la evidencia científica. En 2016 fundó la empresa social Change Dyslexia, desde la que trabaja en la detección precoz y el apoyo a la dislexia a través de herramientas como Dytective, que ya llega a miles de niños y niñas y a cientos de centros educativos. Y lo hace defendiendo una idea clave: poner a las personas en el centro es la única manera de construir una innovación verdaderamente humana.
¿Cómo recuerdas el momento en que descubriste que tenías dislexia y cómo influyó en tu manera de aprender y mirar el mundo?
Aunque fue un punto de inflexión en mi vida, de niña no lo viví así. Cuando me lo dijeron, mi reacción fue muy pragmática: “Vale… ¿y ahora qué hago para sacar buenas notas y tener amigos?”. Recuerdo estar completamente enfocada en la siguiente acción, en cómo resolverlo, más que en el hecho de tener “dislexia” en sí.
¿Qué te llevó a transformar esa dificultad en una vocación profesional?
Siempre quise ser investigadora. Trabajé muchísimo para sacar buenas notas y conseguir las becas que me permitieran hacer un doctorado. Ya en mi tesis en inteligencia artificial, mi supervisor, Ricardo Baeza-Yates por aquel entonces vicepresidente de investigación de Yahoo! se dio cuenta de que tenía dislexia y me propuso aplicar la IA a este campo.
Mi vocación siempre fue investigar; la idea de poner ese conocimiento al servicio de un problema que yo conocía de primera mano vino después… y no fue mía. Pero cambió mi vida y mi carrera.
¿Cómo surgió Change Dyslexia y a cuántos niños y niñas ha ayudado hasta hoy?
Nació con una intención muy clara: que la investigación no se quede en los artículos científicos, sino que llegue a cuantas más personas mejor. Empezamos como un proyecto open source y alcanzamos 30.000 usuarios, pero era insostenible. Decidimos entonces crear una empresa social para mantener Dytective con el mínimo coste posible 15 euros al mes y ofrecer becas a quienes no pudieran permitírselo.
El test de riesgo siempre se mantuvo gratuito: más de 450.000 personas lo han realizado y hemos otorgado más de 1.400 becas.
El gran salto ha llegado ahora: gracias al apoyo de EduCaixa y Fundación “la Caixa”, los ejercicios de intervención de Dytective, más de 40.000 actividades científicamente diseñadas, son gratuitos para todos los colegios de España. Desde el 1 de octubre ya se han inscrito 1.200 colegios nuevos.
Dytective es una herramienta que mejora las habilidades de niños y niñas con dislexia. ¿Cómo funciona y qué beneficios aporta?
Dytective mejora la lectura y la escritura mediante un videojuego adaptativo basado en más de una década de investigación científica. Entrena 24 habilidades cognitivas esenciales para la lectoescritura como comprensión, memoria, ortografía o atención y personaliza cada actividad según las necesidades de cada alumno.
El profesorado dispone de informes automáticos para seguir la evolución del alumnado y detectar áreas de mejora de forma ágil.
Reconocido por la UNESCO, el MIT y el Premio Princesa de Girona, Dytective es hoy una herramienta de referencia en intervención e inclusión educativa.
¿Qué papel juega la inteligencia artificial en la detección y apoyo a personas con dislexia?
En nuestro caso, la IA está en el corazón del cribado. Patentamos en 2015 un modelo que permite detectar riesgo de dificultades de lectura y escritura en apenas 15 minutos. Es importante subrayarlo: hablamos de un cribado, nunca de un diagnóstico. Es una primera aproximación que ayuda a identificar posibles dificultades y a intervenir antes.
¿Cómo pueden diseñarse proyectos tecnológicos que sean realmente humanos y accesibles?
Poniendo a las personas en el centro desde el primer día.
En nuestro trabajo, los niños decidieron cómo querían los personajes del videojuego; los docentes definieron cómo debía ser un informe útil y comprensible. Investigamos, prototipamos, testeamos… siempre con ellos.
La tecnología solo es humana cuando se construye con quienes la van a usar, no para ellos.
¿Cómo valoras la respuesta del sistema educativo ante las dificultades de aprendizaje?
El sistema educativo es muy amplio: docentes, orientadores, equipos directivos, administraciones autonómicas, familias… hablar de él como un bloque único es complejo.
Lo que sí puedo decir es que la respuesta hacia Dytective ha sido extraordinaria. En menos de dos meses, 1.200 colegios se han registrado. En un país con 14.000 centros de primaria, es una cifra muy significativa en tan poco tiempo.
Ese ritmo demuestra algo fundamental: el sistema educativo quiere dar respuesta a las dificultades de aprendizaje y está abierto a herramientas basadas en evidencia.
¿Cómo podemos fomentar en los niños el respeto y la solidaridad hacia quienes enfrentan desafíos diferentes?
Siendo nosotros el ejemplo.
La solidaridad con la infancia empieza con la solidaridad entre adultos: con nuestros compañeros, con nuestras comunidades y también con nosotros mismos. Los niños aprenden mucho más de lo que ven que de lo que les decimos.
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